jueves, 11 de octubre de 2007

El Lobo Empingado, solidario y peronista.





¡Hola, chicos! Mi nombre es Fernando de Narváez y el zorrito empingado me pidió que les contara un lindo cuentito.


"...Había una vez, en el bosque, una niña llamada Caperucita Roja, que vivía en una cabaña con su abuelita.


Una linda tarde de verano, Caperucita salió a repartir los pastelitos que preparaba su abuelita a todos los animalitos del bosque. Antes de salir, su abuelita le dijo:


-Ten cuidado, Caperucita, que puedes toparte con el Lobo Empingado.


Caperucita le dijo que tendría cuidado y salió a hacer su reparto. Como fue encontrando a varios animalitos por el camino, terminó muy pronto con su tarea y, radiante de la alegría, volvió a su cabañita. Cuando abrió la puerta, encontró a su abuelita enlumbrizada y déle bomba y bomba con el Lobo Empingado.


-¡Oh, qué veo! -dijo Caperucita- ¡Qué desilusión para una niñita como yo!


Y el Lobo Empingado se enterneció al ver llorar a Caperucita y la invitó a sumarse a la partuza. Caperucita aceptó y los tres fueron felices, comieron perdices y cagaron a piedrazos al leñador cuando vino a querer rescatar a no sé qué carajo quién....